Avignon

Avignon y sus esplendores

Avignon es una ciudad donde la historia está presente en cada esquina. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es también conocida como la Ciudad de los Papas, por haber acogido entre sus muros a varios pontífices durante el siglo XIV.

Es una ciudad con un impresionante patrimonio arquitectónico que le hace retroceder en el tiempo. En todas partes encontrará la combinación ideal de modernidad y la esencia antigua que ha logrado mantener hasta hoy.

Dentro de sus murallas encontrará espectaculares edificios que son testigos de tiempos pasados. Estructuras sublimes como el Palacio de los Papas, el Palacio de las Monarquías, la Catedral de Notre-Dame-des-Doms o el Museo del Petit Palais le dejarán sin aliento con su belleza intemporal.

 

Nuestras actividades

Hay muchos lugares con encanto que visitar en Aviñón:

El Palacio de los Papas, situado en la plaza del Palacio de Avignon, es sin duda el lugar de visita obligada en la ciudad. Es una fortaleza de estilo gótico que sirvió de residencia a los papas en el siglo XIV. Su belleza arquitectónica es el marco ideal para vivir momentos inolvidables. Cerca del Palacio de los Papas se encuentra la Catedral de Notre-Dame-des-Doms, cuya estructura original data del siglo XII. Desde entonces, ha sufrido varios cambios, pero sigue conservando el aura histórica que caracteriza a la ciudad.

La plaza que rodea el palacio también ofrece otros bellos atractivos arquitectónicos. Disfrute de una visita cultural al Museo del Petit Palais, una antigua residencia arzobispal que ahora funciona como museo de pintura y escultura con obras excepcionales.

El Rocher des Doms, situado en el emplazamiento original de la ciudad, se ha convertido en un magnífico jardín colgante con espectaculares vistas sobre el Ródano que encantará a quienes lo visiten. El famoso Puente de Avignon ofrece otro escenario ideal para realizar paseos memorables.

Es una de las pocas ciudades francesas que aún conserva sus murallas. Las murallas de Aviñón son un verdadero espectáculo, se extienden a lo largo de 4 km y ofrecen a los turistas una visión del siglo XIV.

Sus numerosas puertas y torres crean bellas imágenes que parecen congeladas en el tiempo, ofreciendo a sus visitantes el escenario perfecto para viajar en el tiempo. El centro histórico es otro lugar que no debe perderse.

Pasee por sus calles y visite lugares como la Place de l'Horloge, situada en el corazón de la ciudad. Si quiere disfrutar de una vista inolvidable de la ciudad, puede visitar el parque Rocher des Doms para disfrutar de las mejores vistas panorámicas.

Por supuesto, no puede faltar una visita al mercado de las Halles, para vivir una exquisita experiencia gastronómica de la mano de sus habitantes.