Actividades en Marsella

En esta ciudad mediterránea, los matices históricos conviven con las pinceladas de modernidad que caracterizan nuestro tiempo. Así, las obras arquitectónicas de arquitectos de renombre como Zaha Hadid o Stefano Boeri destacan como parte de los atractivos de la ciudad y ofrecen a los turistas un espectáculo visual único

Le célèbre Vieux-Port est le cœur de la ville et l’un des endroits les plus visités où vous pourrez également déguster un verre de pastis. Actuellement, c’est un port touristique qui rassemble différents monuments historiques et son phare unique donnant des paysages aux allures de cartes postales.

Otra de las cosas que no puede faltar en su viaje es la visita a la Basílica de Notre-Dame de la Garde, símbolo ineludible de la ciudad que se alza majestuosa desde finales del siglo XIX y que ofrece las mejores vistas panorámicas de la región.

Si le gusta la arquitectura, visite la Cité Radieuse, joya de la imaginación del arquitecto Le Corbusier y parte del patrimonio pintoresco de Marsella.

El excepcional patrimonio cultural se aprecia en los diversos museos y galerías que adornan la ciudad. El Museo de las Civilizaciones Europeas y Mediterráneas, más conocido como MUCEM, refleja el espíritu de la Marsella moderna y ofrece exposiciones durante todo el año que tienen como telón de fondo las impresionantes vistas al mar desde sus instalaciones.

conocida como los "Campos Elíseos" de Marsella, donde, además de disfrutar de las hermosas vistas, podrá disfrutar de un día de compras..

connue sous le nom de « Champs-Élysées » de Marseille, où, en plus, de profiter de superbes vues, vous pouvez également faire une journée de shopping.

El Palacio Longchamp es un icono de la historia de Marsella que se mantiene en pie desde el siglo XIX con su emblemática fuente y alberga el Museo de Historia Natural, el Museo de Bellas Artes, el Zoo y el Parque Botánico.

El barrio de Estaque es un lugar colorido y encantador con pequeñas casas tradicionales que llenan la escena de un aire antiguo que cautiva a locales y turistas.

No hay que perderse: el archipiélago de Frioul con sus paisajes de ensueño, un verdadero esplendor natural. Las islas de Pomègues, Ratonneau, Tiboulen e If, con su célebre castillo, son el marco ideal para vivir experiencias inolvidables.

El Parque Nacional de las Calanques es, sin duda, el destino turístico más popular cada año. Este paraíso natural se extiende desde Marsella hasta Cassis y La Ciotat, con espectaculares playas turquesas y cristalinas que invitan al baño.

Arte, cultura e historia se dan cita en Marsella para deleitar a sus visitantes con una explosión de colores y sabores. La magia de sus edificios y de sus diversos lugares se combina con la gastronomía provenzal que no puede dejar de probar. Déjese tentar por una bullabesa o por uno de sus irresistibles platos típicos, no se arrepentirá.